¿Qué pasa cuando tenemos sueños lúcidos?
En los sueños, cuando estás lúcido puedes hacer lo que quieras, puedes volar, puedes transformar tu realidad, te puedes convertir en una mariposa y salir volando por la ventana, te puedes aparecer en París, puedes hacer lo que quieras.
En un sueño lúcido, ya no te enganchas con los problemas del sueño, porque sabes que son problemas irreales. Cuando no estás lúcido, sufres, batallas y trabajas. Haces un montón de cosas y despiertas y te das cuenta de que todo fue un sueño y que ese sufrimiento no tenía caso. Si te hubieras dado cuenta de que era un sueño, hubieras podido transformarlo o cambiar tu actitud ante éste.
El yoga de los sueños es maravilloso, porque nos ayuda a entrenarnos para despertar en nuestros sueños y luego en esto que consideramos “la realidad”.
Al irte a dormir cada noche hay un proceso de disolución similar al que sucede en el proceso de la muerte, poco a poco empiezas a dejar de oír, de percibir, de sentir tu cuerpo, y te empiezas a relajar, hasta que te quedas dormido y hay un «black out”, te quedas inconsciente hasta que apareces en un sueño.
Cómo practicar el Yoga de los Sueños
Una de las prácticas que puedes hacer es atender a la respiración, otra es atender al espacio de la mente y los eventos mentales que surgen en ese espacio, haces estas prácticas mientras te empiezas a quedar dormida. Es difícil al principio porque al estar poniendo atención te despiertas, debes relajarte y soltar, como cuando te permites quedarte dormido cada noche.
Te empiezas a relajar profundamente, pero mantienes un hilo de conciencia, lo que va a pasar primero es que van a empezar a surgir imágenes hipnagógicas y mini-sueños. Por ejemplo, puedes ver de pronto, una cara o un lugar. Hay momentos en que entras a todo un escenario o toda una realidad virtual, es cómo un mini-sueño pero se desvanece y sigues en tu cama. Es un periodo en el que pequeñas imágenes surgen en la mente y vuelves a estar consciente de tu cuerpo y de la habitación donde te estás quedando dormida. Si mantienes esa atención y simplemente no te enganchas con esos mini-sueños, observas como están surgiendo en la mente y pasando, de pronto entras a un estado donde no hay apariencias, no hay percepciones, tampoco estás percibiendo tu cuerpo. Ese, es el estado lúcido sin sueños, normalmente entramos inconscientes, esto no quiere decir que no haya conciencia, sino que es la claridad es tan baja que no nos damos cuenta de éste, pero si tú entras consciente en ese estado, la experiencia es como estar consciente en un espacio vacío y si te esperas un poco, de pronto se manifiesta un sueño y percibes que ya estás en el sueño pero sabes que te acabas de quedar dormido, te acuerdas porque entraste con lucidez al sueño.
Sabes que estás soñando, y aunque todo parece muy real, muy vívido, eres libre, porque estás lúcido, eres completamente libre. Puedes hacer lo que quieras, por ejemplo, puedes volar, aparecer en La Torre Eiffel, ir a un concierto o ir a esquiar, lo que tú quieras lo puedes hacer en un sueño lúcido porque eres libre.
Niveles de Lucidez
Cabe mencionar que hay niveles de lucidez, ya que el sueño es tan impactante que es fácil volver a creer que es la realidad y perder la lucidez. También puede ser que estés medio lúcido, es decir, sabes que es un sueño pero parece tan real que aunque sabes que estás soñando no puedes hacer algunas cosas porque una parte de tu mente quiere creer que es real. Entonces ahí es donde entra la práctica del Yoga de los Sueños, por ejemplo hay gente que no puede atravesar una pared porque parece que la pared es muy real y no la puedes atravesar, hay diferentes trucos que puedes poner en práctica, por ejemplo, te pones de espaldas y caminas hacia atrás y es más fácil atravesarla.
Lo primero es practicar el entrar con lucidez al sueño y luego mantener esa lucidez porque a veces de la emoción te despiertas. Después ya empiezas a practicar el yoga de los sueños donde transformas cosas, te transformas a ti misma, y te das cuenta de que esa realidad no es inherente y que está surgiendo de tu mente y luego todo ese aprendizaje lo traemos a la vida diaria.
Por lo tanto, intenta al irte a dormir, mantener un poco de conciencia, puedes empezar practicando la atención de la respiración, y si puedes haz el cambio a la práctica de atender al espacio de la mente y los eventos mentales, esto es, simplemente estar presente y observar, cuando surge un pensamiento, una emoción, o una imagen, etc, sólo observa estos eventos como un espectador y dejar que se disuelvan. Muchas veces aunque hagas esta práctica, no entras consciente al estado sin sueños, sino que pierdes conciencia por un momento pero muy pronto apareces en un sueño y debido a que te quedaste dormido haciendo esta práctica, estando presente y con esa intención de estar lúcido en tus sueños, al empezar el sueño y al percibir algo extraño, reconoces que estás soñando, te das cuenta y te haces lúcido.
Genera la intención detener sueños lúcidos
Hay diferentes formas de entrar al sueño practicando, uno es el antes mencionado, quedarte dormido mientras mantienes consciencia de que te estas quedando dormida. Otra es generando la intención de volverte lúcido en tus sueños y recordando generar esta intención durante el día y en especial antes de dormir, para que cuando te quedes dormido recuerdes que quieres tener sueños lúcidos. También durante el proceso de quedarte dormido, generas una intención de lo que harás en tu sueño, por ejemplo: “En cuanto me dé cuenta que estoy soñando, voy a volar o voy a ir a visitar a mi abuelito que ya se murió, puedes generar el deseo que tú quieras, ya que al tener una intención y visualizar lo que vas a hacer, esto te ayudará a que cuando estés lucido no te desconciertes y te vuelvas a atrapar en el sueño, perdiendo lucidez, sino que como ya sabes qué vas a hacer, es más posible que puedas mantener la lucidez.
Todas estas prácticas son también para prepararnos para el morir, porque mientras más lucidez tengamos en ese momento, más posibilidades de experimentarlo con libertad. Mientras más conocimiento tengamos de ese proceso, menos miedo nos va a dar, ya que sabremos lo que va a pasar.
He grabado varias meditaciones en el grupo de meditación que guío semanalmente, que te pueden ayudar si las quieres escuchar y practicar antes de dormir, te pueden ayudar a relajarte profundamente y a mantener algo de conciencia mientras te quedas dormido. Aquí debajo te dejaré los enlaces. Me han dicho varias personas que las han hecho y que les ayudan mucho a dormirse relajados y a despertar más descansados.